lunes, 27 de julio de 2009

RÓTULA GORILLAPOD BH-1

A raíz de un comentario en la Bodeguilla de Olympus y 4/3 sobre la nueva rótula BH1 para el Gorillapod, me he decidido a compartir mi breve experiencia con ella.

El sistema Gorillapod de Joby ya debe ser conocido por todos: las patas están formadas por una serie de bolas encajadas en unas cavidades dobles, a modo de relojes de arena, lo que hace que sean totalmente articuladas en cualquier sentido, en tramos de alrededor de 1 centímetro entre una articulación y otra.

Las articulaciones son bastante rígidas, lo suficiente para aguantar el peso de la cámara para el que están diseñadas (hay tres modelos; por orden de peso que aguantan son el estándar, el SLR y el SLR-Zoom)

Además, las bolas están rodeadas con unos aros de goma, lo que les posibilita un agarre bastante bueno en casi cualquier superficie.

No obstante, este sistema tiene una gran dificultad que limita su uso: debido a su propio diseño, totalmente flexible, es prácticamente imposible que la cámara quede perfectamente nivelada.

Este hecho, al menos para mí, hace que la utilidad del Gorillapod sea bastante limitada.

Afortunadamente, Joby acaba de dar una respuesta a esta situación, presentando la nueva rótula de bola BH-1.

RÓTULA GORILLAPOD BH-1

Esta rótula está diseñada especialmente para el modelo SLR-Zoom, con el que según el fabricante aguanta un peso de hasta tres kilos. No obstante, tiene una rosca estándar, con lo cual puede utilizarse en cualquier Gorillapod o cualquier otro tripode.

Lo primero que sorprende de esta rótula es su pequeño tamaño: apenas 7 centímetros de alto desde la base del trípode hasta la zapata.

También sorprende su calidad de construcción (el cuerpo es de aluminio y la bola es totalmente metálica). Quizás lo que aparenta ser más débil es la rosca que tiene para apretar y aflojar el conjunto, pero por lo que he podido probar, no ha presentado ningún problema (lo más probable es que sólo es exterior sea de plástico y goma; dado el resto del conjunto apostaría que por dentro es de sólido metal.

Al tratarse de una rótula de bola, el funcionamiento es muy simple: se afloja la rosca, se nivela la cámara como queramos, y se vuelve a apretar la rosca. El funcionamiento es suave. La bola gira 360 grados y bascula 90 grados, lo que le otorga una gran versatilidad.


LA ZAPATA

La zapata es toda una pieza de diseño: es extraíble, pequeña y finísima.

Se extrae de la rótula pulsando pequeña pestaña en el frontal de ésta. La extracción y enganche de la zapata es fácil y rápido. Al engancharla, se oye un sonoro clic, y el conjunto queda absolutamente sólido.

La zapata se ajusta a la base de la cámara con un gran tornillo metálico que da gran confianza. La parte superior de la zapata es de goma, con lo que queda firmemente sujeta a la base de la cámara, sin rayarla.

Al ser tan fina, el peso de la cámara queda muy cerca de la rótula, dando más estabilidad al conjunto.

Por último, la zapata incorpora en su parte trasera un pequeño nivel, imprescindible para los que no tengan la Olympus E-30, je, je...


CONCLUSIONES

En definitiva, esta nueva rótula da una funcionalidad totalmente nueva a los Gorillapod.

Hasta ahora, el Gorillapod apenas había pasado de ser un accesorio curioso para enseñárselo a los amigos, pero que en la mayoría de las ocasiones -al menos en mi caso- se quedaba en el armario.

Sin embargo, gracias a la nueva rótula BH-1, de repente se ha convertido en un trípode absolutamente práctico y funcional, un accesorio casi casi imprescindible.


Como dirían en otros sitios:

Altamente recomendado

je, je..

1 comentario:

  1. Interesante muy interesante, y como bien dices imprescindible, yo le tengo puesta una minirotula, pero esta es la definitiva.

    Gracias Miguel

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